El ajo condimento esencial de numerosos platos de la dieta mediterránea

garlic3Olorosamente sano. Así es el ajo, condimento esencial de
numerosos platos de la dieta mediterránea. Su fama como alimento saludable a lo
largo de la historia está fundamentada científicamente: se ha demostrado que
reduce el colesterol malo, ayuda a eliminar toxinas y es un excelente aliado
contra las infecciones.

Cuenta la leyenda que cuando el Diablo caminaba por el Jardín del Edén, “el
ajo surgió de la tierra que pisaba su pie izquierdo y una cebolla apareció bajo
su pie derecho”. La historia del ajo hunde sus raíces en viejos relatos
mitológicos que dejan patente las propiedades curativas y cuasi milagrosas que
le han sido atribuidas desde la antigüedad. Las creencias de nuestros ancestros
han quedado científicamente demostradas gracias a los numerosos estudios que han
puesto de relevancia los beneficios saludables que tiene para el organismo la
inclusión del ajo como alimento básico en una dieta equilibrada: es antiséptico,
fungicida –destruye los hongos–, bactericida, disminuye la presión sanguínea, es
diurético, expectorante y contiene componentes antioxidantes que previenen el
envejecimiento.

 

El ajo es, en realidad, una planta de unos 30 cm de altura. Lo que nos
comemos son sus pequeños bulbos –los dientes de ajo–, que se presentan agrupados
en un número que suele rondar la decena. Pariente cercano de la cebolla –ambos
pertenecen a la misma familia: las Liliáceas–, sus propiedades van mucho más
lejos que la de ahuyentar imaginarios vampiros en la oscuridad de la noche.
Antes de que Louis Pasteur demostrara, en 1858, que el ajo es un antibiótico
natural, ya era usado por los monjes del medievo para protegerse de la peste.
Incluso la primera huelga de la Historia tuvo como protagonista a este delicioso
condimento: los obreros que construían la Gran Pirámide de Keops, en Egipto,
detuvieron sus labores cuando se vieron privados de su ración diaria de ajo.

 

Mejor crudo

Desde Pasteur, multitud de investigaciones han evidenciado que este alimento
inhibe el crecimiento de gérmenes patógenos y fortalece nuestras defensas, por
lo que su consumo regular ayuda a combatir y prevenir infecciones como gripes y
resfriados. Según un estudio del Servicio de Endocrinología del Hospital Central
de Cruz Roja (Madrid) presentado en la XXVII edición de la Feria Internacional
del Ajo celebrada en Las Pedroñeras (Cuenca), “el jugo fresco de los ajos, es
decir, el ajo consumido como nos lo ofrece la naturaleza, es una fuente de salud
y prevención contra algunas patologías”.

El ajo es fuente de yodo y vitamina C. Además de una ventaja añadida: no
conlleva ninguno de los efectos secundarios de los antibióticos químicos, uno de
los cuales es la destrucción de la flora intestinal. “Al contrario, actúa
favoreciendo la secreción de jugos gástricos y provocando un aumento de la
secreción biliar, por lo que resulta un excelente digestivo”, asegura el
informe.

Parte de los beneficios del ajo se deben a la acción de un compuesto azufrado
(sulfuro de alilo) que, al entrar en contacto con el aire, se transforma en otra
sustancia (alicina), responsable de su penetrante olor. Esto ocurre cuando
cortamos o machacamos el ajo. El efecto terapéutico de la alicina sólo dura unos
minutos, por lo que es importante ingerir el ajo crudo rápidamente para
disfrutar de sus propiedades saludables. Al cocinarlo, la alicina se destruye.

Victoria Beckham tiene razón: “España huele a ajo”. Y no vamos a ser nosotros
quienes le llevemos la contraria a la estirada mujer del guapo futbolista del
Real Madrid. Desde tiempos inmemoriales, el ajo ha sido utilizado como
condimento indispensable de numerosos platos, y no sólo en nuestra gastronomía.
En la cocina china es, junto al jengibre, el aroma preponderante; es esencial en
la cocina mexicana y también en Francia, donde podemos encontrar la mantequilla
y la mayonesa al ajo. Y dorado en aceite, adorna pastas, carnes y pescados en el
mundo entero.

 

«Guárdalos en un lugar seco y
fresco»
Andoni ZabalaJefe de Compras Frutería EROSKIExisten muchas variedades de ajo. La más consumida en nuestro país es el ajo
blanco, seguida del ajo morado. El ajo puede secarse y usarse en láminas o
molido. A la hora de freírlos no hay que dejar que se doren demasiado pues
adquieren un sabor amargo. Para conservar el ajo conviene guardarlo en un
lugar fresco, seco, ventilado y protegido de la luz. Para su conservación
las cabezas de ajo han de mantenerse en el sitio más oscuro y seco de la
cocina o de la despensa porque con ambientes húmedos germinan y se pudren
rápidamente. No deben guardarse en la nevera.

 

Trucos para anular su olor

Si el fuerte y característico olor del ajo es un impedimento para que disfrutes
de sus propiedades saludables, los tratamientos naturistas resuelven el problema
prescribiendo cápsulas y grageas inodoras con ajo en polvo o de aceite de ajo.
Puedes encontrarlas en farmacias, centros de dietética y herbolarios. Otra
opción es probar los trucos tradicionales para anular su desagradable olor:
masticar perejil fresco, remolacha o tomar un buen vaso de leche después de
comerlo. Funciona.

 

Sopa de ajo andaluza
Ingredientes para 4 personas:

  • 15 dientes de ajo,
  • 4 picatostes (rebanadas de pan frito),
  • 4 huevos,
  • 1/2 l de caldo de carne,
  • 1/2 l. de agua.
  • sal,
  • cominos,
  • aceite de oliva.

En una olla, hervimos a fuego lento el caldo de carne y el agua. Sin
quitarles la piel, hacemos un corte transversal a los dientes de ajos, los
freímos y añadimos al caldo. Freímos las rebanadas de pan y reservamos.
Ponemos en el caldo 1/3 de cucharadita de café de cominos. Dejamos hervir
lento durante 15 minutos. Poco antes de servir, se escalfan en el caldo 4
huevos y se retira del fuego. Comprobamos el punto de sal. Servimos en cada
plato suficiente caldo, ajos y uno de los huevos. Decoramos con un
picatoste.

 

“Los ajos que pesan poco puede que ya estén secos”

Begoña San José Sección Frutería Hipermercado EROSKI Max Center Barakaldo
(Vizcaya)

A la hora de comprar, debemos fijarnos en que estén duros y apretados y sean
pesados para su tamaño. Los ajos que pesan poco puede que estén ya secos. En
nuestra cocina, tiraremos directamente a la basura aquellos que presenten la
cabeza mohosa y blanda. Si están en ristras, podemos colgarlos en la despensa.
En cuanto a su periodo de conservación, las cabezas de ajo blancas duran en buen
estado unos 6 meses, y las rojas 1 año. Este alimento no puede faltar en tu
despensa. Sin él, muchos de nuestros platos no serían tan aromáticos y sabrosos.

 

 

Ajo morado, embajador de la
gastronomía manchega
Julio Bacete Presidente de la Indicación
Geográfica Protegida Ajo Morado Las Pedroñeras (Cuenca)Hablar de las
virtudes del ajo morado es hablar de Las Pedroñeras. Esta comarca conquense
es el principal centro de cultivo y producción del ‘Ajo Morado de Las
Pedroñeras’, también extendido por La Mancha Baja. Es la principal fuente de
riqueza de la comarca y, por tanto, alrededor del ‘Ajo Morado de Las
Pedroñeras’ (el mejor ajo del mundo) gira la vida, tradiciones y cultura de
las gentes de esta comarca. Las condiciones medioambientales de la zona, la
humedad, temperatura y naturaleza del suelo son las que han ido creando este
ecotipo particular, perfectamente adaptado y vinculado al medio geográfico
en el que se produce. Sus propiedades medicinales se deben al concentrado de
vitaminas C, B1 y B6, así como a su contenido en azufre y a un componente de
la penicilina, llamado alicina, con propiedades profilácticas, bactericida y
curativas.Al ajo morado se le atribuyen efectos beneficiosos ante enfermedades
cardiovasculares, artritis, reumatismos, afecciones del aparato digestivo e
hipertensión. Ayuda a reducir el nivel de colesterol y triglicéridos en
sangre, disminuyendo así el riesgo de infarto y trombosis. Es un potente
bactericida y es muy útil contra la bronquitis, la tos y el catarro. Es un
estupendo purificador de sustancias tóxicas, actúa contra los parásitos y
ayuda a cicatrizar las heridas. Dentro de la gastronomía española, el ‘Ajo
Morado de Las Pedroñeras’ constituye un ingrediente esencial, por sus
virtudes y eficacia culinaria, destacan

 

Fuente: http://ideasana.fundacioneroski.es/web/es/13/ajo/

Un comentario

  1. QUISIERA SABER CUANTO ES LA RACIÓN O PORCIÓN RECOMENDADA DE AJO POR PERSONA O POR PLATILLO, YA QUE PREPARO MENÚ DE ALBERGUES PARA GERIATRICOS, DISCAPACITADOS Y OTRO TIPO DE USUARIOS.
    SE LOS AGRADECERÍA A LA BREVEDAD, YA QUE MIS JEFES NO ME DEJAN INTRODUCIR EL AJO, POR QUE NO CONOCEN SUS BENEFICIOS, Y QUIEREN INFORMACIÓN SUSTENTADA EN BASES Y CANTIDADES. CON AGRADECIMIENTO LÍA.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Botón volver arriba